Recibí una charla de parte del señor Rafael Cancel Miranda hace un tiempo atrás. Uno de los temas del que él señor Rafael Cancel
Miranda nos habló era sobre la lucha por las cosas en las que él creía y aunque
hay cosas que yo no esté de acuerdo como
lo era la forma en que se resolvieron algunas cosas con bombas y tiros (para mi
la violencia no importa como sea ni en la situación en la cual se presenta, es
la manera más incorrecta de solucionar problemas), pienso que hizo bien porque
luchaba por algo que era muy querido para él y que el entendía que otro tenía
que luchar por.
Luchaba por ese derecho de proteger lo que era de él.
De su Puerto Rico que estaba siendo americanizado e invadido por extranjeros.
Los extranjeros querían apoderarse de Puerto Rico en sí y el tomó la acción de hacer
algo por ello.
Una de las pocas cosas que recuerdo acerca de lo que él
nos habló, era que cuando el fue a ir con un grupo de Cadetes de la República y
estaban matando a las personas, su madre con un traje blanco que luego terminó
completamente rojo y ese detalle que parece ser pequeño me afectó mucho.
Inmediatamente tuve imágenes de cuerpos siendo destrozados con armas y
lentamente cayendo al suelo mientras su madre se trepaba encima de ellos para
poder sobrevivir.
El hecho de que ellos hayan llegado hasta Washington
para llamar la atención de los federales pegando un tiro hacia el techo—eso fue
la parte que encontré incorrecta. Hay muchas maneras de llamar la atención que
no sea la violencia, pero tal vez puede que lo diga por mi forma de pensar. Pudieron
haber hablado o ir directamente hacia un federal e entrevistarlo acerca de los
asuntos que suceden y luego haber hecho algo al respecto—pero, sin violencia.
Pudieron haber combatido “flores contra balas” como
decía el mismo Cancel Miranda. Pudieron haber actuado de una manera más
correcta.
